El Centro Democrático deplora que la JEP impida la extradición de Jesús Santrich no obstante las pruebas sobre delitos de narcotráfico cometidos con posterioridad a la firma de los Acuerdos de La Habana. Estos acuerdos crearon un Cogobierno con el narcotráfico que imposibilita al ejecutivo para combatirlo. Y de allí se deriva la crisis de orden público que en nombre de la equivocada paz trataron de ocultar quienes hoy son críticos del Gobierno. Además, tanto la sentencia como los acertados salvamentos de voto demuestran una profunda crisis institucional, quizá sin antecedentes en los últimos 60 años; crisis, de destrucción institucional, que debe resolverse de fondo porque de lo contrario se pone en riesgo la recuperación de la economía y del tejido social en que está empeñado el Gobierno Nacional.
La JEP, ante la apelación de la Procuraduría, debería simplemente aceptar que el delito fue posterior a los acuerdos y desistir de juzgar los hechos, lo que solamente corresponde al país requirente de la extradición. Esa apelación debería surtirse sin poner en libertad al señor Jesús Santrich.
Los excesos de la JEP y el rechazo de sectores políticos a las lógicas objeciones presidenciales demuestran falta de posibilidades para introducir reformas, lo que acrecienta el número de ciudadanos que piden derogar esta institución.
Sabemos que el buen criterio del Presidente de la República, doctor Iván Duque, en su labor de recuperar el ejercicio de autoridad que el país había cedido en favor de la Farc y de otros grupos terroristas, considerará todas las opciones que conduzcan a la extradición de Jesús Santrich.
El Fiscal General, doctor Néstor Humberto Martínez, presentó renuncia con entereza admirable, decisión que debería reconsiderar para continuar su valerosa tarea contra el narco terrorismo.
Bogotá, 15 de mayo de 2019.